Hace ya tiempo que en Chile se viene observando un lento y gradual deterioro de nuestra economía. En la época dorada crecíamos a tasas del 7%. No teníamos deuda. Éramos acreedores netos. Pero todo eso ya es historia. Parece que Chile dejó de preocuparse de la economía. Ya no importan tanto el crecimiento, el empleo, el gasto, la deuda, las tasas de interés y para qué hablar de esa palabra tan antigua como es la inflación. Saliendo del covid-19, vivimos una euforia fugaz. El lema parece ser gastar y comprar como si el mundo se fuera a acabar. Nuestra deuda aumenta y los fondos soberanos se consumen. Volver a la prudencia no será fácil. Exigirá mucha responsabilidad. Si la política nos permite convivir, es la economía la que nos permite vivir mejor”.
“Deterioro económico”
Leonidas Montes, director CEP (El Mercurio, 5.8.21)