¡No dañar al mercado de capitales!
“El desarrollo del mercado de capitales ha sido un factor diferenciador de Chile en las últimas décadas.
La norma de no imponer una doble tributación al ahorro gravando las ganancias de capital en la compraventa de acciones existe en Chile desde 2001 cuando fue introducida por el Presidente Lagos. Fue parte de una reforma al mercado de capitales para aumentar su profundidad, liquidez y desarrollo.
Esta reforma fue profundizada en los años 2007 y 2010, reflejando el claro y transversal consenso que, durante las últimas dos décadas, se generó en nuestro país acerca de la importancia de contar con un mercado de capitales profundo, moderno e integrado para estimular la inversión y el crecimiento.
Los resultados fueron altamente positivos para la economía: el monto transado en la bolsa se multiplicó por tres en el quinquenio siguiente a la reforma de 2001, el número de transacciones se multiplicó por diez en los últimos 20 años y Chile dio un salto en indicadores como el índice de desarrollo financiero del FMI, superando al promedio mundial, a los países emergentes y a los países de la Alianza del Pacífico. Todo redundó en una mejor cantidad y calidad de ahorro e inversión.
La norma actual que se abstiene de gravar las ganancias de capital, permite reducir el costo de financiamiento para las empresas y evita desplazar la gestión del ahorro hacia mercados fuera de Chile.
Colocar un impuesto generaría una doble tributación, debido a que tanto las utilidades de la empresa como los dividendos ya han pagado el impuesto a la renta.
Además, eliminar esta norma tendría efectos negativos en la eficiencia de los mercados, al generar un incentivo a mantener activos por más tiempo del óptimo, con el único fin de evitar el impuesto. Esto afectaría decisiones de diversificación de portafolios que hoy se producen de forma libre y eficiente. La literatura documenta efectos negativos sobre la inversión, el PIB y la liquidez de los mercados.
Algunos postulan alterar esta norma con una mirada exclusivamente recaudatoria de tributos para el Fisco. Incluso con este prisma parcial, los potenciales efectos en recaudación son ínfimos y no compensan el costo de tal medida para la economía”.
Hermann González, coordinador Macroeconómico de CLAPES UC