
Economía y Sociedad
Capitalización. La revolución chilena que recorre el mundo
Noviembre 2025
Argentina
Por Germán Kammerath, exministro de Comunicaciones del presidente Menem (Diario Perfil Córdoba, 8.7.24; Extracto)
En 1990, en mi carácter de diputado provincial por la UCeDe, visité Chile para conocer de cerca lo que los economistas llamaban “el milagro chileno”. En 1991 recibí el pedido de la editorial de presentar en Buenos Aires el libro “El Cascabel al Gato” de José Piñera, exministro de Chile.
Aprovechando el viaje, pedí al Presidente Menem, a quien ya conocía, que recibiera a José Piñera y escuchara en primera persona la exitosa experiencia de la reforma estructural que había llevado adelante en Chile.
El presidente Menem nos recibió afectuosa y puntualmente a las 5 de la tarde. Lo acompañaban el Ministro de Economía, Domingo Cavallo, la Secretaria del Interior Adelina de Viola y yo. José Piñera le explicó las 3 modernizaciones que había realizado en Chile: la Reforma Minera, que mirada en perspectiva convirtió a Chile en una potencia en ese rubro; la Reforma Laboral, que estableció los convenios laborales por empresa que aún rigen, y la Reforma Previsional que creó el pionero sistema de capitalización individual.
Los ojos de Menem se maravillaban. Efectuaba preguntas prácticas con gran curiosidad. El argumento final de José Piñera fue enormemente sólido: la reforma también creó un mercado de capitales propio y nacional, solidificando el sistema financiero, que hizo posible financiar la adquisición de casas con créditos hipotecarios a 30 años y numerosa infraestructura privada. Hay que recorrer Chile hoy para comprobar cómo eso se cumplió, sacándonos ventaja en la calidad y solidez de las infraestructuras. Por otra parte, los fondos de pensiones permitieron el crecimiento de numerosas empresas chilenas y su expansión por América Latina.
En medio de ese clima ‘mágico’ de un Presidente maravillado por esta experiencia, Menem se dirigió al ministro Cavallo, con firmeza y cordialidad, y le dijo: “Ministro… ¿y nosotros qué estamos pensando hacer en esta materia?”. El ministro respondió que con un equipo de expertos argentinos, encabezado por el talentoso Walter Schulthess, estaban trabajando sobre un modelo mixto.
Fue allí cuando el presidente Menem, con gran determinación, le expresó: “Ministro, quiero para Argentina un sistema como el de Chile. Quiero que los argentinos sean dueños de su ahorro previsional. Esa es mi decisión”. El Presidente Menem tomó así la decisión histórica de cambiar el régimen previsional.
Hace muy pocas semanas se realizó en Buenos Aires una gran conferencia del Instituto Cato, “El renacer de la libertad en Argentina y el mundo”, en la que participaron como oradores estrella el exministro chileno José Piñera y el actual presidente argentino Javier Milei. Piñera, en su alocución, hizo referencia a aquella histórica reunión con el presidente Menem en 1991, que tuve el honor de impulsar.
La ley maldita
Con la Ley 26.425, el Congreso argentino procedió a estatizar el sistema previsional el 20 de noviembre de 2008.
La estatización fue aprobada en el Senado por 46 votos a favor y 18 en contra, y en la Cámara de Diputados por 162 votos a favor y 75 en contra.
